¿Qué es el mantenimiento web?
Como las propias palabras lo dicen, se refiere a mantener una web. Pero esto quiere decir que tienes que estar pendiente de que el sitio web siempre esté operativo , funcionando, actualizado y sin errores. Esto es un servicio que muchas empresas venden y automatizan, pero no está de más hacerlo a mano, pues cada web es un mundo y si no te pasas en persona a ver como van las cosas, puede que estén dejando de funcionar y no te hayas enterado.
En muchas empresas el mantenimiento web se limita a hacer backups de la web cada X tiempo y esto es algo que a día de hoy se automatiza y que está muy bien, pero un buen servicio de mantenimiento web no se debe solo limitar a ello, tambien hay que pasarse por el panel de control para probar que todo este en orden, revisar la versión de Php (Si usa este lenguaje) en caso de ser necesario y estar al tanto de estas pequeñas cosas que te pueden llevar un quebradero de cabeza.
¿Es lo mismo el mantenimiento de una web que el mantenimiento de una web WordPress?
En primera instancia no, ya que el mantenimiento de una plataforma hecha a código propio siempre es mucho más costoso ya que tienes más cosas que revisar, sin embargo, en WordPress muchas veces es suficiente con hacer lo siguiente:
- Actualizar el tema
- Actualizar los plugins
- Comprobar que en el panel no aparezca ningún error de plugins
- Crear backups
- Hacer limpieza de la base de datos
- Comprobar antes de actualizar que los plugins vayan a ser compatibles entre ellos
- Actualizar el PHP del servidor si es necesario (ojo con no cargarte nada)
- Desactivar y eliminar plugins en desuso
- Visitar de vez en cuando la sección de estado salud del sitio
¿Cada cuánto tiempo se debe hacer el mantenimiento web?
No existe una respuesta universal para esto, ya que todo depende de la complejidad del sitio y del tráfico que reciba. Sin embargo, como regla general, se recomienda hacer revisiones mensuales para asegurarse de que todo esté en orden. Si tu web recibe mucho tráfico o depende de muchos plugins y extensiones, lo ideal sería estar más encima y hacer comprobaciones más frecuentes, como cada dos semanas. Recuerda, es mejor prevenir que curar.
Es importante también hacer revisiones tras cualquier cambio importante, como la actualización de un plugin o la instalación de nuevas funcionalidades. En estos casos, es recomendable entrar al sitio, navegar como si fueras un usuario más y asegurarse de que todo está funcionando correctamente. No te confíes solo de los avisos automáticos o de que «todo debería estar bien», porque lo que parece una pequeña actualización puede provocar errores inesperados.
¿Qué pasa si no hago mantenimiento?
Si no haces un mantenimiento regular, empiezan a acumularse los problemas. Al principio, puede que ni te enteres, pero poco a poco las actualizaciones que no hiciste se van sumando, los plugins empiezan a fallar, el sitio web se vuelve más lento o incluso vulnerable a ataques de seguridad. En el peor de los casos, tu web puede caer o, peor aún, ser hackeada por no haber actualizado los parches de seguridad a tiempo. Y créeme, lidiar con una web caída o hackeada es mucho más complicado (y caro) que haber dedicado un rato cada mes a hacer un par de revisiones.
Otra cosa que suele pasar es que si no limpias la base de datos, puede llegar a acumularse tanto contenido inútil (como spam, comentarios basura o datos de plugins desinstalados) que el rendimiento de tu web caiga en picado. Y cuando la velocidad de carga de tu sitio empieza a verse afectada, los usuarios también se impacientan y abandonan antes de interactuar.